En un rincón soleado
El viento resistía
A no perder su valentía
Las hojas del verano len-ta-men-te caen
Cálidos besos en un despertar matutino
Descubriamos nuestros cuerpos a la noche de la memoria
El tiempo con su trabajo perseverante y silencioso
A esculpido en mi la armadura de la madurez
Ténue luz en un dia de Julio
En una calle de Paris
El amor de una mujer
Ahora sólo hay un cuadro y una habitación
Y en un viejo armario guardo
El cuadro que, juntos, dibujamos
El final de una ilusión
El principio de un sueño.
Ahora me pregunto
Si fuiste sueño o realidad, pero
Hay preguntas que no tienen respuesta.
Marzo, 2010
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